domingo, 2 de octubre de 2016

Golpe de Estado "a la catalana" XXIX. Elecciones al Parlament

El próximo pasado 7 de setiembre publiqué una “entrada” dedicada al otro astuto de “la banda del 3%”, Puigdemónt y en ella pretendí en trazos gruesos y con brocha gorda describir, en función de sus intereses más o menos espurios, las distintas fuerzas y debilidades que conforman esa olla de grillos a la que, para entendernos, llamo el Glorioso Movimiento Nacional Catalán. Decía entonces:

 “A) Alta burguesía expectante “a ver qué pasa” sin representante político acreditado que jugaran sus cartas en cada circunstancia, según sople el viento para sus intereses de clase.
B)    Pequeña burguesía divida, a su vez en a) pujolistas-poujadistas (tenderos, menestrales, excarlistas, vaticanistas, funcionarios de nuevo cuño, etc) huestes de Convergencia  cuyo objetivo es mantenerse en el poder para seguir medrando y defender al Fundador en las mejores condiciones y a los que eso de la independencia, en el fondo, le suena a  pura quimera y b) Sedicentes izquierdistas donde encontramos xenófobos, abuelitos cebolleta etc, gentes todas de Esquerra Republicana y que por definición ni saben lo que quieren ni, en su caso, cómo conseguirlo. Eso sí, hacen reír a todo el Cuerpo de Guardia de Buckinham Palace con sus dislates.
C)    Clases urbanas, jóvenes desocupados con formación académica, izquierdosos exsocialistas huérfanos de referente político, ingenuos que creen en (H)adas y pisarellos varios etc que se refugian de las inclemencias políticas en esa sopa de letras que forman lo que podríamos denominar “podemos en común”.
D)   Gentes variopintas por su extracción social y formación, sedicentes anticapitalistas adornados con ribetes de praxis totalitarias. Su objetivo es dominar el mundo mundial y para ello lo primero es acabar con el Régimen Político Español, lo que provocaría una desestabilización europea que aprovecharían los chinos para tener entradas gratis total en Disneyworld París e imponer su sistema Capitalista sin libertades que tan buen resultado les da, siempre que los citados chinos aprendan y hablen en catalán y hagan de la “botifarra d`ou” el plato nacional chino. Estos artistas son conocidos como “cupaires” por votar y militar en la CUP, tinglado pseudopolítico que alcanzó el estrellato mediático de la mano de su líder Supremo: Sandalio Zamarreta.”

Brillan por su ausencia los asalariados, los sindicalistas de base, las clases populares, en fin. No obstante, ello el Pujolismo desde que alcanzó el Poder padeció el “síndrome sinecdoquial” (tomó la parte por el todo como todo totalitarismo que se precie) y lo tradujo en una expresión -fer país (hacer país)- con la que pretendía “superar” la existencia y la dinámica de las clases sociales por una unidad transversal con la que enfrentarse al Estado opresor. Es un truco muy viejo que se ha utilizado por la burguesía a lo largo de la historia y teorizado por autores de marcada tendencia facistoide (Gonzalo Fernández de la Mora, Daniel Bell, Francis Fukuyama etc): todos, empresarios y trabajadores  tenemos un único objeto, la producción de mercancías o servicios, si no hay producción no hay salarios, de tal suerte que todo lo que se oponga o dificulte la producción tiene iguales repercusiones negativas, tanto patronos como trabajadores porque se ataca a un país, no a una clase social. Tal es la ideología de la clase dominante que pretende y consigue que otras clases la hagan como propia.
En alguna ocasión he escrito, parafraseando a Lenin, que “el nacionalismo es la enfermedad infantil del capitalismo” o dicho en otros términos, los Nacionalismo son cosa de la Derecha, de la Burguesía alta y media e incluso de la pequeña que es de donde se nutren los partidos totalitarios como sabe cualquiera que tenga mínimos conocimientos históricos.
En Cataluña desde el fin del franquismo político que no el sociológico, el nacionalismo mayoritario era de corte moderado, era Autonomista. Convergencia tenía patente de corso para hacer deshacer a su antojo a cambio de apoyar a los partidos mayoritarios necesitados de sostén parlamentario. La historia de despropósitos (inmersión lingüística, multas por uso de la lengua castellana, interdicción de acceso a la función pública a los ciudadanos que no tuvieran determinado nivel de conocimiento de la otra lengua oficial y lo que realmente interesaba: protección contra jueces y fiscales que se tomaban su trabajo en serio de ahí que pueda hablarse sin caer en hipérbole que el pujolismo fue una Cleptocracia.
Después de las payasadas de Zapatero, Maragall y Moriles ese Nacionalismo Autonomista devino independentista: la señera no proporcionaba suficiente protección contra sus desmanes, ahora se necesitaba la gente en la calle. A propósito: el Gobierno de la Generalitat ha negado siempre que subvencione o promueva manifestaciones el 11 de setiembre o adquiera con fondos públicos -malversación- material para la pseudoconsulta del 9H etc y ahora nos viene el necio este de Puigdemont y ayer, en Lisboa y dice lo contrario. Hay que ser muy zoquete. Dijo que:

“El President quiso sacar músculo poniendo en el escaparate todo lo que su Ejecutivo y el de su predecesor Artur Mas han llevado a cabo en los últimos tiempos para cumplir su objetivo. "Llevamos más de cinco años haciendo lo imposible, sacando a la calle millones de personas, teniendo una mayoría absoluta en el Parlament a favor de la independencia... y estamos cada vez más cerca".

En síntesis, Convergencia no cree en la Independencia, instrumentaliza la reclamación utilizando todo tipo de mendacidades para conservar el poder. Sin subirse al barco de los independentistas hubiera sido barrido del mapa político catalán, estaría en el “gallinero” como sucede en el Congreso. Detentando el poder podrá negociar en mejores condiciones cuando se produzca la implosión del Glorioso Movimiento Nacional y se repetirá la historia: unos cientos de miles de ignorantes les sacarán las castañas del fuego a la burguesía. No aprenderán nunca.
Existe otra posibilidad remota: la crisis política derivada de la pésima gestión del Gobierno de Puigdemont con la consiguiente retirada de apoyo parlamentario obligue a la convocatoria de elecciones y cada grupo se presente por separada. En este supuesto Convergencia dejará de ser útil a los independentistas (CUP, ERC, PODEM-COLAU-y-sus-cubans-boys) que intentarían montar un Govern-Circo sin fieras, ni equilibristas, únicamente con payasos por lo que la risa está garantizada.
Las CUPs pretenden presentarse como revolucionarios, libertarios, anticapitalistas etc. Su programa político parece redactado por un descendiente de Herve Hoxha al que “le cante el alerón” físico e ideológico.
ERC es…… indescriptible si se quieren guardar las normas de rigor científico en materia política
Y la Señora COLAU con su aspecto de Ninot de la Grossa navideña es la demagogia en carne mortal.

Con estos mimbres la juerga y el CATchondeo está asegurado. Permaneced atentos a la pantalla.


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