Rouco

El ínclito Monseñor Rouco Varela, Presidente de la Conferencia Espiscopal Española pidió el voto de los creyentes para aq1uellos partidos que estaban a favor de la vida, en contra del matrimonio homosexual etc. Blanco y en botella. Una vez proclamada la victoria de los suyos se ha aprestado a tomar posición para estar en la mejor a la hora de obtener prebendas y privilegios y a tal efecto se descolgado con unas declaraciones en las que sin rubor ni pudor intelectual -¿qué será eso referido a un eclesiástico?- sostiene que: "se trata, en el fondo, de la pérdida de valores morales, que va de la mano del relativismo y del olvido de Dios y de su santa ley, cuyas consecuencias son la corrupción política y económica, la codicia, la búsqueda del propio interés a toda costa, el menosprecio de la vida humana mediante políticas y conductas abortistas y antinatalistas, la desprotección y la disolución institucional del matrimonio y de la familia, la instrumentalización y el deterioro de la educación". Según esta peregrina tesis podemos olvidarnos de la la naturaleza sistémica de la misma, del agotamiento del modo de producción capitalista, de burbujas financieras e inmobiliarias, de desregulación de mercados -del dinero, laboral etc-, la crisis es un castigo divino ante la pérdida de fe de las gentes, así que parados ya saben los parados, los desahuciados, los pensionistas y demás victimas de la crisis: arrepentíos de los pecados y veréis colmados vuestros anhelos de toda índole. Es obvio que Botin va mucho a misa. Amen.