domingo, 12 de febrero de 2017

La manipulación del lenguaje (I)




El grado de ignorancia en materia económico-política de la práctica totalidad de las políticos independentistas (Gobierno, Parlamento, Ayuntamientos, medios de comunicación, sindicatos y tutti quanti chupa de la mamella presupuestaria) es excepcional, asombroso, sensacional, , sobresaliente, sorprendente, chocante. Veamos un ejemplo:

“…….. las decisiones económicas se toman con criterios políticos. Por eso el Gobierno español a menudo toma decisiones equivocadas.  Hay decisiones hechas con criterio político que son claramente contraproducentes, porque no tiene en cuenta el retorno de las inversiones.”

El artista que ha hecho estas declaraciones en La Vanguardia de hoy es mosén Junqueras, sedicente izquierdista, meapilas metido a dirigir la economía de una Región en quiebra. El tipo no se enterada de nada, pero intentaré encontrar una explicación a tanto desafuero.

Lenin dejó escrito que la política es “la expresión más condensada de la economía” y en ella cristalizan los intereses fundamentales de clase. La política penetra todas las esferas de la vida social. La actuación política persigue conquistar consolidar y ampliar el poder e imponer y garantizar los intereses de la clase dominante, clase dominante que fija el lenguaje, la educación y controla los medios de reproducción social tal y como señaló en su día Marx: “El Gobierno del Estado moderno no es más que una junta que administra los negocios comunes de toda la clase burguesa. (Manifiesto comunista).

Dicho en Román paladino: la política -la que hacen los políticos- tiene por misión la gestión de los intereses del capital y por tanto oponer política a economía o es ignorancia o es manipulación, ya que ésta informa y condiciona la Aquélla, de tal suerte que cualquier análisis de una realidad política debe empezar por interrogarse "cui prodest scelus, is fecit".

Cada clase social tiene sus propios intereses y si bien el propio desarrollo capitalista ha  generado grupos sociales que no necesariamente son dueños de medios de producción material, es lo cierto que las llamadas profesiones liberales, el Alto funcionariado etc tienen un status social muy parecido al de aquéllos y efectos sociológicos deben considerarse como un “todo”.

No creo en la llamada “transversalidad”, término que pretende difuminar el concepto de clase social al ritmo de la música de los ocasos de las ideologías que se entonan por doquier, lo que me lleva a traer a colación la manipulación del lenguaje

Se vive una época en que se hace un uso inflacionario de algunas palabras produce necesariamente al desgaste de esos vocablos, a vaciarlos de contenido. El uso de consignas, frases hechas, mantras etc es una manifestación de dicho desgaste. Pensemos lo que ha sucedido con términos como democracia, solidaridad o libertad en manos de los propagandistas del  independentismo que han dejado a las precitadas hermosas palabras sin poder vocativo. Se pretende que la gente no piense y lo haga por ellos el político, especialista en persuasión y marketin político para el que trabajan empresas publicitarias y de relaciones públicas pagadas con “dinero público”, de todos pero para intereses de grupo o clase.


Volveré sobre esta cuestión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario